* English version below
1. Respeto
Bailarines aprenden a tener respeto. Respeto hacia el baile y a la cultura, y respeto hacia otros/as bailarines que llevan dedicados a este arte por años, que han contribuído mucho con la comunidad, y que son o han sido un ícono en el mundo de baile. Es necesario reconocer que dominar alguna habilidad o talento, en este caso, quizá un estilo de baile, requiere años de estudio, práctica y expereincia. Bailarines también aprenden a respetar gente en la comunidad, como los profesores, compañeros, estudiantes, y cualquier persona involucrada en su desarrollo artístico. Un bailarín o bailarina entiende que no se tiene que comparar con otros o ser irrespetuoso con alguien más. Por último, bailarines aprenden a respetar su propio cuerpo. Uno tiene que trabajar con su cuerpo, no en contra.
2. Disciplina
Confianza se consigue con disciplina y entrenamiento. Bailar, como cualquier otro tipo de arte escénico, requiere horas y horas de práctica, y la única manera de sobrellevarlo, es a través de la disciplina. Es necesario que un bailarín o bailarina esté dispuesto a repetir algo una y otra y otra vez, hasta no sólo conseguir hacerlo correctamente, sino hasta que no se puede hacer mal otra vez. Nosotros estamos buscando siempre nuevas maneras de hacer algo que quizá ya hemos hecho antes. Se necesita enfoque, concentración y mucha determinación para no sucumbir ante cualquier obstáculo.
"Los sueños se consiguen no con suerte, sino con propósito, pasión y disciplina."
3. Coraje
Se necesita coraje para pararse en un escenario frente a 10 o 1000 personas y hacer una presentación - ya sea bailar, cantar o actuar. Bailarines desarrollan el coraje necesario para luchar contra la ansiedad, el miedo de no hacer un buen papel, o de olvidarse de la rutina, o quizá sólo el miedo de ser ridiculizado por la audiencia. También toma coraje pedir ayuda, ya sea entrenamiento o alguna crítica constructiva, para poder mejorar tu propio baile. Además, bailarines tiene el suficiente coraje de creer en sus propias habilidades y su propio talento, así como creer en la capacidad de mejorar y desarrollar siempre su técnica y expresión al bailar.
4. Pasión
No es suficiente sentir curiosidad o atracción por el baile para mantenerse constante. Se tiene que desarrollar un fuerte sentimiento y compromiso, que será lo que te empuje a continuar en los momentos que tú mismo sientas que ya no puedas. Un bailarín o bailarina tiene que aprender a auto-motivarse a pesar de sentirse cansado, con hambre, "sin
inspiración", o a pesar de no tener el ambiente perfecto para ensayar o presentarse. Es la pasión que sentimos por el baile lo que nos impulsa a lo largo del proceso de aprendizaje y crecimiento cada día.
5. Dedicación
Toma mucho esfuerzo y tenacidad convertirse en un excelente bailarín profesional. No es suficiente tomar sólo clases, pero se necesita también mucha práctica por cuenta propia. Bailarines, especialmente en belly dance, aprenden que también se tienen que dedicar a contribuir con la comunidad y apoyar a otros/as bailarines. Tienes que ir a festivales, seminarios, conocer maestros, estudiantes, tienes que involucrarte. Y eso requiere tiempo y dedicación también. La dedicación de un bailarín también incluye ver y aprender de los mejores maestros. Uno tiene que pasar horas viendo videos o presentaciones en vivo. Un bailarín aprende que necesita también conocer de la historia del baile, la cultura, y la lengua de las canciones que baila; y también aprende que necesita cuidar de su cuerpo ya que es el vehículo de expresión al bailar.
6. Paciencia
7. Perseverancia
La perseverancia es lo que te impulsa a lo largo de largas horas de entrenamiento. La perseverancia te llevará a donde quieres llegar, y más. Ser perseverante te ayudará a dominar ese paso o coreografía en particular, aún así no hayas conseguido hacerlo bien aún las 20 primeras veces. Si alguien critica tu trabajo, te mantendrás fuerte y continuarás a creer en ti mismo gracias a la perseverancia también.
8. Humildad
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